8 señales de que el parto se acerca

¿Contracciones regulares? Estás a punto de dar a luz

El signo más revelador de que el parto está a punto de comenzar es la aparición de contracciones regulares. A diferencia de las contracciones de Braxton Hicks (que pueden producirse a lo largo de todo el embarazo), las contracciones del parto prematuro son más intensas, más frecuentes, se producen a intervalos cortos y, lo que es más importante, son regulares. Estas contracciones significan que el parto está a punto de comenzar. Por lo tanto, es hora de ir a la sala de maternidad.

Romper aguas: una visita a la maternidad

¿Sientes un líquido claro, caliente e inodoro que baja por tus piernas? ¡Probablemente se te está rompiendo la fuente! ¡Es hora de ir a la sala de maternidad! Tu bebé ya no está protegido de las infecciones y el parto (si no ha empezado ya) debería empezar muy pronto.

La pérdida del tapón mucoso: te queda poco tiempo

El tapón mucoso "cierra" el cuello del útero. Su expulsión corresponde, pues, a un movimiento del útero, como su dilatación o sus contracciones. ¿Has notado la presencia de esta pequeña mucosidad? ¡Calma! En la mayoría de las mujeres, el tapón mucoso se expulsa mucho antes del inicio del parto, normalmente entre una semana y 10 días antes de conocer al bebé. ¿Necesitas tranquilidad? Habla con tu médico o matrona.

Las ganas de orinar: una pista pero no una emergencia

En las últimas semanas antes del parto, el bebé comienza a descender hacia la pelvis para colocarse en el canal de parto. Este movimiento puede producirse entre 3 y 4 semanas antes del gran día en el caso de las primíparas o sólo en las horas previas al inicio del parto en el caso de las mujeres que ya han dado a luz. A medida que el bebé desciende, probablemente presionará su vejiga. Esto puede hacer que tengas una necesidad frecuente y urgente de orinar. Pero no hay que asustarse: ¡aún te quedan unos buenos días antes de irte a la maternidad!

Pulmones más ligeros: ¡disfruta!

A medida que el bebé desciende en la pelvis, el fondo del útero, que solía comprimir los pulmones, es menos perceptible. Como resultado, la presión sobre los pulmones que sentías durante el embarazo desaparece y sientes que puedes respirar mejor. Una vez más, disfrútalo: si el bebé viene pronto, ¡todavía tienes unos días buenos y tranquilos para disfrutar!

Dolor de espalda: no es fiable si no tiene otros síntomas

El parto se acerca y tu útero se mueve para prepararse. Para algunas mujeres, esto provoca dolor en la parte baja de la espalda. El dolor de espalda es habitual durante el embarazo y no siempre se corresponde con el inicio del parto si se produce solo. Pero cuando se combina con otros síntomas, como las contracciones, puede ser una señal de que se acerca el parto.

Alta energía: una señal para las madres

Aunque los médicos no explican realmente este fenómeno, muchas madres afirman haber experimentado una explosión de energía en los días u horas anteriores al parto. De nuevo, ¡aprovéchalo!

Flujo vaginal más espeso: cuidado

En las semanas o días previos al parto, el flujo vaginal puede parecer más espeso o abundante que durante el resto del embarazo. Esto puede ser una señal de que estás a punto de dar a luz. El color de tu flujo no debe cambiar. Si notas que tu flujo se enrojece y tiende a volverse más fluido, consulta con tu médico.

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